Reseña de El desván de Tesla.

Gracias a la editorial por el envío del ejemplar.

Título: El desván de Tesla.

Título original: Tesla's Attic.

Autores: Neal Shusterman y Eric Elfman.

Editorial: Anaya.

Páginas: 292

Formato: Tapa blanda con solapas.

Fecha de publicación: 2015

ISBN: 9788467861631

Saga: Los Accelerati #1

Un joven de catorce años llamado Nick, su hermano menor y su padre se mudan a la destartalada casa victoriana que acaban de heredar. Cuando Nick abre la puerta del desván, cae una tostadora que le pega en la cabeza. Ese será el comienzo de extrañas experiencias con los viejos trastos que encuentra en el desván. Tras deshacerse de todos ellos en una venta que organiza a la puerta de su casa, Nick hace amistad con Mitch, Caitlin y Vince, con quienes descubre que todos aquellos trastos tenían propiedades extraordinarias. Y aún más: es como si el desván mismo tuviera inteligencia... y una finalidad.

A pesar de que a simple vista este libro parece un poco infantil, me llamó un montón la atención así que la editorial muy amablemente me lo envió.

Nick decide hacer un mercadillo con todos los trastos que había en el desván de la tía Greta. Un mercadillo abocado al fracaso que tiene un gran éxito, pero eso no es lo más raro que ocurre, ya que empiezan a ocurrir cosas extrañas y pronto él, junto con otros tres chicos más, descubren que esos objetos no son tan corrientes como parecen, sino que tienen propiedades...especiales.

La historia tiene una trama bastante interesante y es muy ágil de leer. Aunque al principio puede parecer un pelín pesado, enseguida empieza a hacerse mucho más merecedor de leerlo.

Nick es un joven de catorce años que ha perdido a su madre en el incendio de su casa y ha de empezar de nuevo en otro Estado, a mitad de curso, cosa que le da bastante miedo.

Caitlin es una chica con bastante popularidad que tiene una vida lo que puede decirse aburrida, hasta que Nick llega al pueblo y ella le compra uno de los extraños objetos. Gracias a ello su vida pasará a ser más emocionante.

Danny es el hermano pequeño de Nick. Él no ha heredado el talento de su hermano y su padre para el béisbol y echa mucho de menos a su madre.

Lo mejor de este libro quizás haya sido cómo los Accelerati le quieren mostrar a Nick lo que son capaces de llegar a hacer si no les da los objetos del desván.

Lo peor ha sido, en una sola palabra: Petula. Petula es una compañera de instituto de Nick, Caitlin, Vince y Mich. Ella le compra a Nick una cámara y está obsesionada con Nick. Su obsesión llega hasta tal punto que no le importa que compañeros que nunca le han hecho nada o una señora mayor mueran con tal de que no lo hagan ella y Nick. Me enervaba siempre que aparecía con sus caprichos de niña pequeña y su egoísmo.

En definitiva, a pesar del inicio un poco lento y de personajes como Petula, ha sido un libro muy bueno que una vez que me puse enserio con él, tardé una tarde en acabarlo. Muy recomendable, sin duda.

-¡Eh papá! ¿Qué te parece un poco de béisbol antes de irnos?

-¡De algún modo estás sintonizando el universo! La rueda parlante te ha convertido en uno de esos radiotelescopios que pueden conectar con el Big Bang.

-Que te mordió una araña radioactiva y ahora puedes atrapar ladrones como si fueran moscas.